Uno de los mayores quebraderos de cabeza para un usuario en el uso del teléfono móvil viene cuando éste nos avisa de que la memoria es insuficiente. Cuidado, hay que diferenciar entre la memoria referida al almacenamiento del dispositivo y la memoria RAM. El segundo caso suele ser más problemático según envejece el móvil.
La memoria RAM suele sufrir según pasa el tiempo y el dispositivo se hace ‘mayor’ y ‘antiguo’. El uso de varias apps a la vez pueden provocar que el smartphone se ralentice y funcione de manera muy lenta (incluso que se bloquee). El peso actual de aplicaciones (y actualizaciones) ha ido jubilando dispositivos de 512 MB y 1GB de RAM y también ha ralentizado otros con mayor capacidad. Esto no significa que el móvil quede inservible, sino que es aconsejable probar con algunos trucos que ‘salven’ el teléfono durante unos meses antes de cambiar, tal y como explican desde AndroidPit.
Para comprobar cuánta RAM consumen vuestras apps (y cerrar las que no se usen) basta con Ajustes -> Opciones de desarrollo -> Estadísticas. Allí podrás ‘Forzar la detención’ de las que no se usen. Varios fabricantes están generalizando la inclusión de un acceso rápido bajo la barra de notificaciones y con solo pulsar sobre él se libera todo el espacio posible. Si tu dispositivo no dispone de esta opción, también existen aplicaciones, como Advanced Task Killer, que pueden ayudarte a liberar memoria RAM.
Memoria de almacenamiento insuficiente
Por otro lado está la falta de memoria de almacenamiento, algo que suele dar problemas antes que la RAM y que muchos solucionan con memorias externas. Es aconsejable, no solo liberar memoria borrando archivos que puedas almacenar en la nube o un disco duro externo (o que no te sirvan ya), sino vacíar también carpetas que muchos no tienen en cuenta y que suelen estar más escondidas: un buen ejemplo son las carpetas ‘Sent’ de Whatsapp, que almacenan todos los archivos que envías a través de esta app y llegan a ocupar gigas de tu memoria si no los borras.